La Entidad de Saneamiento y Depuración de Aguas Residuales (Esamur) participa en diferentes iniciativas europeas para mejorar la calidad de las aguas depuradas, impulsar la eficiencia energética de las plantas depuradoras y aplicar técnicas más sostenibles en los procesos de tratamiento de las aguas residuales a través de los proyectos Aquacycle, Life Amia, Life Dry4Gas y Trineflex. Todos los proyectos tienen como objetivo desarrollar técnicas más sostenibles y fomentar la economía verde.
“Esamur tiene entre sus principales objetivos impulsar proyectos en las estaciones depuradoras y fomentar el ahorro energético, la eficiencia en la gestión y la sostenibilidad ambiental. La economía circular, a través del aprovechamiento de los recursos, es otra de sus prioridades, con el aprovechamiento no solo del agua depurada, sino también del lodo de las depuradoras, material con el que se puede producir biogás destinado a autoconsumo”, aseguró el gerente de Esamur, Ignacio Díaz.
La función principal del proyecto Life Dry4Gas es el secado solar del lodo procedente de la depuradora para la recuperación de energía mediante gasificación. El destino de este gas puede ser la inyección y venta del gas o la reutilización interna en la estación depuradora. En el proyecto participan CIEMAT, CEBAS-CSIC, Aitesa, EHS, Rank, EC Innova y Esamur. Ubicado en San Javier, cuenta con un presupuesto de 2.962.426 € y una subvención de 1.678.239.
El proyecto Aquacycle comprueba la idoneidad y viabilidad de un sistema de depuración respetuoso medioambientalmente y con muy bajo consumo energético. Un proyecto adecuado para países en desarrollo que permitiría obtener un agua de calidad suficiente para su reutilización en agricultura. En el proyecto participan Grecia, Líbano, Túnez, Malta y España (Esamur y Plataforma Solar de Almería). El proyecto está situado en el municipio de Blanca, cuenta con un presupuesto de 2.800.000 € y recibe una subvención de 2.500.000.
Con el proyecto Life Amia se pretende conseguir la protección del medio acuático contra la contaminación causada por la presencia de microorganismos patógenos y microcontaminantes no eliminados en las aguas. En el proyecto, ubicado en Totana, participan FACSA, Atlantis Consulting, Arvia Technology, CSIC, IPROMA y Esamur. Dispone de un presupuesto de 1.945.914 € y recibe una subvención de 1.070.250.
Finalmente, el proyecto Trineflex consigue la transformación de procesos industriales con altos consumos de energía, reduciendo dichos consumos mediante mejoras en el proceso y el uso de energías renovables, y buscando la flexibilidad en los procesos para reducir los picos de energía. Para ello se integran técnicas de inteligencia artificial y big data con la implementación de gemelos digitales que se integran a su vez en sistemas de ayuda a la decisión. Este proyecto se lleva a cabo en Alcantarilla, cuenta con 29 socios europeos de 11 países y dispone de un presupuesto de 19.262.988 €. Es financiado por la Unión Europea con 1.271.000 €.