SUBVENCIONES

La CARM amplía el plazo para solicitar el bono social digital hasta el 30 de noviembre

El bono digital tendrá una cuantía máxima de 240 euros al año

La convocatoria está dotada con más de 1 M€ y beneficiará a 4.400 familias en situación de vulnerabilidad económica

La Comunidad, a través de la Consejería de Política Social, Familias e Igualdad, ha ampliado hasta el 30 de noviembre el plazo para solicitar el bono social digital, que subvenciona el acceso al servicio de conexión a internet a personas en situación de vulnerabilidad económica, y beneficiará a unas 4.400 familias de la Región de Murcia.

En concreto, se concederá un bono por persona y familia, con una cuantía máxima de 240 euros al año, lo que supondrá un ahorro aproximado de 20 euros al mes en la factura de contratación del servicio.

Así, hasta el 30 de noviembre de 2024 podrán presentarse las solicitudes, tanto de forma telemática como presencial a través de cualquier registro público o ventanilla única, según recoge el Boletín Oficial de la Región de Murcia.

La convocatoria está dotada con un presupuesto de 1.056.720 € y se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia Next Generation.

Para solicitar el bono social digital es necesario que en la unidad familiar exista al menos un beneficiario de Ingreso Mínimo Vital o de Renta Básica e indicar con qué operadora se quiere suscribir el contrato, de las 44 adheridas al convenio con la Comunidad, cuya consulta puede realizarse en operadorasbonodigital.carm.es.

El bono social digital tendrá un período de 12 meses no prorrogables, aunque se permite volver a solicitarlo por el mismo tiempo de duración una vez finalizada la concesión inicial.

Asimismo, las bases de la convocatoria determinan que la contratación del servicio de conexión a Internet deberá realizarse mediante fibra óptica, no a través de redes móviles o radiofrecuencia. También contempla la opción de mejorar la velocidad de conexión contratada, siempre que ésta sea menor de 30 megas. De igual forma, se establece que el bono no se pagará directamente a la persona beneficiaria, sino a la operadora seleccionada.