El sector de la distribución y la reparación de vehículos afianzó el pasado ejercicio su empleo, después de haberlo hecho también en 2021. En 2022 los concesionarios de nuestro país emplearon a 153.747 personas, frente a las 152.225 del año anterior, según datos presentados por Faconauto en un encuentro con la prensa previo a la celebración de su Congreso & Expo, los próximos días 1 y 2 de marzo.
Faconauto ha explicado que, pese al mal comportamiento del mercado del automóvil en 2022, los concesionarios lograron cerrar el ejercicio con una rentabilidad positiva del 2,1% (la más alta de los últimos diez años). Esto ha permitido a las empresas soportar sus plantillas y, en muchos casos, ampliarlas con nuevos perfiles profesionales vinculados sobre todo a procesos digitales, al impulso de nuevas áreas de negocio y al buen momento que atraviesa la posventa.
En cualquier caso, la patronal ha vinculado el mantenimiento del empleo a que se recupere el umbral del millón de vehículos comercializados en nuestro país y ha recordado que en el periodo 2017-2022 los concesionarios han perdido más de 8.000 puestos de trabajo, por el recorte de puntos de venta, derivado de la concentración que está experimentando el sector. De igual modo, el propio mercado se ha ido haciendo más pequeño en esta transición hacia el vehículo eléctrico y tras el impacto de la pandemia.
Al respecto, el presidente de Faconauto, Gerardo Pérez ha advertido que el mercado español empequeñecerá aún más si sale adelante la nueva normativa Euro 7, “que nos puede dejar en la irrelevancia como país productor y también puede llevarse por delante buena parte del tejido empresarial que representa la distribución de vehículos. El resultado será el contrario del esperado: se aleja el vehículo privado del ciudadano medio, porque los coches serán más caros, se impide la renovación del parque y se pone en peligro el proceso de descarbonización. Los Gobiernos de países productores, como el nuestro, tendrán que buscar el equilibrio entre afrontar la reconversión hacia una movilidad más sostenible y no dejar en el alero el porvenir del sector”.
FACTURACIÓN TAMBIÉN ESTABLE
Los cuellos de botella en el aprovisionamiento de vehículos, así como el contexto económico general siguieron condicionando mucho la actividad del sector. Sin embargo, los concesionarios mantuvieron su facturación, que se situó en los 36.137 M€. Por áreas de actividad, la que más sufrió fue la de vehículo de ocasión, que cayó un 13,4% (6.203 M€), muy penalizada por la falta de stock de vehículos usados “jóvenes”, que son la base del negocio de los concesionarios, mientras que la facturación de la posventa creció un 12,8%, con 5.162 M€.
Pese a que las matriculaciones cayeron, la facturación procedente del vehículo nuevo también se mantuvo debido sobre todo al apreciable incremento del precio de los vehículos, que se encarecieron de media el 8,6% en 2022, hasta los 33.750 euros. Según Faconauto, esta cifra culmina una trayectoria que se ha acentuado desde la pandemia, con una subida media en el precio del 23% desde 2019. Faconauto ha vinculado esta tendencia al importante esfuerzo tecnológico que están haciendo los fabricantes para acelerar la descarbonización de sus modelos, situación que se ha visto agravada por la carestía de producto derivada de la crisis de los microprocesadores y por el encarecimiento de las materias primas.
La red oficial quedó establecida el año pasado en 2.011 concesionarios, continuando la pérdida de efectivos en las redes: en los últimos diez años se han perdido 700 concesionarios. La patronal ha explicado que el sector en nuestro país está acelerando su concentración, pero detrás de esta pérdida de concesionarios también están las sucesivas crisis económicas.
Pese al buen comportamiento del mercado del mes de enero, Faconauto mantiene su previsión de matriculaciones para 2023, con dos escenarios: un crecimiento del 5% (870.000 unidades), al que habría que sumar un 10% adicional si se solucionan los cuellos de botella en la producción (960.000 unidades).
“No podemos conformarnos con estos niveles de matriculaciones, porque no son suficientes y además no son las que está pidiendo Europa en vehículos electrificados. Se necesitan medidas muy concretas para salir de esta peligrosa tendencia y, al tiempo, avanzar en la electrificación. Necesitamos que se tomen en serio las malas estadísticas de ventas de vehículos y sus consecuencias. No podemos perder un año más”, ha dicho Marta Blázquez, vicepresidenta ejecutiva de Faconauto.